Esta mañana ha sido muy gratificante... estaba en el aparcamiento de la escuela y una mamá que bajaba del coche con su niña le ha dicho: mira ya están llegando las seños...¡era yo!
Hoy Ignacio no quería comer por lo que la seño le ha dicho que se quedaba sin probar el segundo plato hasta que no terminara con el primero. Cuando ha visto que a los demás se les ponía la ensalada, el pollo y la fruta ha empezado a llorar y ha dicho: ¡no es justo! (nos ha costado a Ignaci y a mi no reirnos)
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